No he podido antes, pero tenía ganas de escribir esta entrada. Este fin de semana he estado en el encuentro del grupo de docentes Google en Valencia. Y ha sido un encuentro genial. Primero, porque los organizadores han hecho un trabajo extraordinario, lleno de originalidad y cercanía. Segundo, porque he podido desvirtualizar a muchos docentes a los que seguía hace tiempo en las redes y reencontrarme con grandes cracks como Juanma Díaz y Gonzalo Romero. En tercer lugar, porque se ha respirado ese ambiente de horizontalidad que últimamente empapa la mayoría de encuentros docentes. Y, además, personalmente, ha resultado un fin de semana muy completo tanto por habernos reencontrado con Neus y Verónica, dos jóvenes valencianas, docentes de Historia, con las que he compartido ya momentos en los encuentros de docentes de ciencias sociales, como por motivos, también, familiares.

De entre todos estos motivos quiero comentar el de la horizontalidad porque la «filosofía Google», a la que hizo referencia mi amigo Gonzalo Romero en la ponencia que abrió el encuentro, que no es otra que democratizar la información y la tecnología, se adapta muy bien a ese espíritu colaborativo y digital que imprime carácter a la innovación educativa. Por eso, el «mundo Google» es tan usado por el «mundo docente», porque nos permite hacer muchas cosas, de manera gratuita e intuitiva y porque con una sola cuenta tenemos posibilidades casi infinitas a nuestro alcance y lo que es más importante, al alcance de nuestro alumnado. En la nube.

En cuanto al taller de flipped learning, comentar que hubo mucho interés en resolver dudas, en buscar argumentos para las posibles críticas y en encontrar ejemplos que ofrecieran alternativas válidas. Y me gustaría contar una anécdota sobre este particular. En el primer taller, una profesora de matemáticas se quejaba de que los padres no estaban de acuerdo con el flipped classroom porque no les mandaba deberes a sus hijos y en el segundo taller, otro profesor de matemáticas me comentó que los padres estaban satisfechos porque no mandaba deberes al usar flipped. Intereses e interpretaciones pueden haber muchas, pero los especialistas somos nosotros los docentes y por ello debemos elegir la estratega de aprendizaje o la metodología con la que mejor aprenda nuestro alumnado, pero teniendo claro que no podemos seguir estancados utilizando solamente metodologías y didácticas que se están demostrando ineficaces para el aprendizaje que necesitan desarrollar nuestros alumnos.

Y me gustaría terminar con algunas conclusiones del encuentro:

1. «Mato por un chromebook». Ágil, ligero, versátil… Se agotan los calificativos. Creo que ahora mismo son la mejor solución para el equipamiento de los centros y para el desarrollo digital de profesorado y alumnado. 
2. Existen herramientas para todo y están en Goggle Suite. No hace falta mucho más.
3. Existe un gran interés docente en ver y aprender experiencias de aula que puedan servirles para cambiar el enfoque de aprendizaje de sus aulas.
4. Hay docentes muy bien preparados y decididos a dar el salto o a continuar con la innovación educativa. Hay gente muy válida que son el presente y, sobre todo, el futuro de la educación de este país, una educación maltratada por la inestabilidad legal y la indefinición e indecisión política.

Por lo tanto, seguimos. Aprendemos en la nube.