Lo que aparece más abajo es un manifiesto surgido por la estupefacción y la indignación por la nueva prueba de acceso a la universidad de la materia de Historia de España.

Si quieres apoyarlo, puedes poner tus datos en la tabla que figura en el mismo documento de Drive y, si tienes Twitter, tuitear el manifiesto y tu opinión sobre la prueba con el hashtag o etiqueta #EBAUhistoriaASÍno.

Aquí lo tenéis:

Entre los objetivos de la LOMCE (RD 1105/20149) se encuentran, por ejemplo, ejercer la ciudadanía democrática…, consolidar una madurez personal y social que le permita actuar de forma responsable y autónoma y desarrollar el espíritu crítico…, participar de forma solidaria en el desarrollo y mejora de su entorno social…, afianzar el espíritu emprendedor con actitudes de creatividad, flexibilidad, iniciativa, trabajo en equipo, confianza en sí mismo y sentido crítico.

Las orientaciones metodológicas de la materia de Historia de España de 2º de bachillerato nos indican que “El aprendizaje en pleno siglo XXI debe enfocarse de manera diferente al aprendizaje tradicional que ha venido predominando hasta ahora…También ha quedado demostrado que el aprendizaje activo es mucho más efectivo que el solo memorístico, ya que el alumnado aprende mucho más y mejor si explica, analiza y evalúa sus conocimientos y es capaz de crear sus contenidos y sus propios conceptos, tanto de manera individual como de forma colaborativa y en red… Por otra parte, el desarrollo de las competencias se ha convertido en la finalidad última y precisa de los procesos formativos y por ello, se hace necesario desarrollar tipos de aprendizaje que permitan al alumnado desarrollar estrategias y herramientas de aprendizaje para toda la vida y que esos aprendizajes adquiridos le sirvan para desenvolverse en cualquier contexto. En este proceso el alumnado tiene que ser el protagonista de su aprendizaje y el aula debe convertirse en un lugar de aprendizaje activo”.

Muchos docentes hemos entendido que la historia es mucho más que fechas, periodos, personajes y datos. Que la historia sirve para debatir, pensar, reflexionar, criticar y conseguir ciudadanos autónomos y solidarios…

¿Y nos salen con esta EBAU?

Uno no tiene más remedio que pensar que quieren acabar con la historia y con las humanidades. En este mundo dominado por lo útil, lo material y lo superfluo, no interesa que se piense, que se critique, que se ponga en entredicho lo establecido, el sistema.

El aprendizaje es un proceso complejo y el aprendizaje escolar está mediatizado por su valoración. Por su evaluación. Y si se quiere evaluar valorando sólo la memoria, el alumnado sólo memorizará y fomentaremos así el aprendizaje bulímico que sólo sirve para salir del paso y para un cierto tipo de alumnado. Y todo esto dará pábulo a las críticas de unas familias desconcertadas y unos alumnos desorientados entre lo que establece la normativa y desarrollan muchos docentes y lo que se les pide después para poder seguir su desarrollo académico y profesional.

Si además, todo esto viene acompañado de una cierta nocturnidad y alevosía y de un cambio drástico en el planteamiento y el contenido de la prueba, el daño es mucho  mayor y como siempre será el alumnado el más perjudicado.

Por todo ello, queremos mostrar nuestro rechazo a una prueba contraria a las normativa vigente y, sobre todo, contraria a un aprendizaje competencial propio de siglo XXI porque fomenta un aprendizaje vacío y memorístico frente a la necesidad de desarrollar una ciudadanía crítica y competente.
Quien quiera apoyar este manifiesto que se apunte en la tabla siguiente y para quien quiera comentar en Twitter, podemos utilizar la etiqueta #EBAUhistoriaASÍno