Hay momentos en que se concentra todo. Esta semana está ocurriendo.

No sólo sigo un poco aturdido por lo vivido en IV Encuentro de Docentes de Ciencias Sociales del que ha ya he comentado algunos temas, sino que ha me han propuesto un artículo sobre el aprendizaje del patrimonio, precisamente a raiz de mi colaboración en el encuentro de Valladolid, para Ineverycrea, se ha publicado mi nueva colaboración en la Revista Entre Estudiantes, ha salido un nuevo número de la revista Flipped Classroom sobre Bachillerato y FP donde colaboro con un artículo sobre trabajo cooperativo en 2º de bachillerato y, finalmente, ha salido la lista de los cien docentes flipped en K-12 más influyentes del mundo entre los que resulta que me encuentro.

Pero, lo más importante es la semana que hemos compartido en el aula y en el patio jugando con juegos diseñados por el alumnado, pruebas cooperativas y concursos. Y, sobre todo, por el comentario de una alumna de 1º de ESO, de una alumna, que podríamos considerar modelo e incluso «empollona», que haciendo la actividad posterior al visionado del vídeo sobre la Grecia antigua y comprobando que se sabía las respuestas por haber visto el vídeo me dijo: «así se aprende mejor y no con tantos exámenes».  Imaginad, la cara que se me quedó.

Y, para finalizar, os dejo algunos vídeos de lo anterior:

Y queda otra sorpresa que ya comentaré en su momento. Cuando se concrete algo más.